El pastrami es una receta tradicional judía, aunque los norteamericanos son considerados los reyes de este manjar. La clave se encuentra en la carne con la que se elabora: carne roja, normalmente ternera, de la parte del vacío, una pieza muy tierna y sabrosa, que se pone en salazón con especias y se somete a un posterior ahumado. La mejor manera de prepararlo es en sandwich y el toque distintivo lo pone la salsa.